Comienzo del Tiempo de Cuaresma
Querida familia:
Acabamos de comenzar el tiempo de cuaresma. Ese tiempo especial para preparar nuestros corazones, para hacer una remodelación, una renovación de nuestra fe, nuestra esperanza y caridad.
Los niños lo han entendido muy bien. Ayer hicimos en cada clase nuestra preparación e imposición de la ceniza.
Se habló de qué cosas hacemos mal, de cómo nos sentimos cuando lo hacemos: todos queremos cambiar, porque así no somos felices, no nos sentimos bien con nosotros mismos ni con los demás; Jesús tampoco nos quiere así y Él es el único que puede cambiar nuestro corazón de piedra en un corazón de carne, sensible, generoso, no egoísta, disponible para amar a los demás… Y esas cosas que estaban mal las quemamos y se convirtieron en ceniza, porque queríamos destruirlas.
Os invito a que, al igual que vuestros hijos, aprovechéis este tiempo de gracia antes de revivir la Pascua, la entrega de Jesús por nosotros. Jesús nos invita a volvernos hacia El, a hacerlo presente en nuestro día a día y no solo cuando la tierra tiembla o temamos por nuestra salud. Su amor es para todo momento y siempre; el tenerlo junto a nosotros, en nuestra familia, será fuente de alegría y seguridad. Ayudad a vuestros hijos a vivir en casa lo que aquí intentamos transmitirle: que Jesús me ama muchísimo, y por lo mismo, me cuida y protege.